Audiencia en días complicados

El pasado miércoles 11 de noviembre en la agenda de la Familia Real figuraban tres audiencias públicas, entre las que se encontraba la que Su Majestad el Rey concedía a los ganadores del concurso escolar “¿Qué es un Rey para ti?”, organizado por la Fundación Institucional Española (FIES) y patrocinado por la Fundación Orange. Sin embargo, los acontecimientos de la vida nacional añadieron a la mañana del miércoles una secuencia de acciones y decisiones políticas excepcionales que, si bien no requerían la presencia física del Rey, exigían su plena atención y dedicación. Es por ello que se decidió cancelar los actos previstos en su agenda para el día citado.

Ahora bien, tanto Don Felipe como su equipo de colaboradores comprendieron pronto los trastornos e inconvenientes que supondría cancelar la audiencia a los ganadores del concurso para las más de cien personas que se estaban desplazando a Madrid desde todos los puntos de la geografía española (alumnos y profesores ganadores junto a sus correspondientes familias y acompañantes). De esta manera, se tomó la decisión de aplazarla sólo unas horas, hasta la tarde del mismo día. El propio Rey se encargó de justificar esta decisión al señalar que “son días complicados, pero sin duda merecía la pena estar con vosotros y recibir este impulso de frescura y de ilusión que representáis todos vosotros”

No nos parece descabellado apuntar una reflexión ahora, varios días después de la audiencia, ya que cuando el paso del tiempo va dejando atrás los acontecimientos, la perspectiva reposada que se adquiere facilita que por encima de los hechos menudos se eleve lo esencial. En esta audiencia concreta, que la casualidad ha hecho que se celebrase en un día semejante, lo esencial radica acaso en que el Jefe del Estado, el Rey de España, se dirigiera a un grupo de niños, consciente de que son los ciudadanos activos del mañana y no se quedara en elogiar o agradecer su trabajo con palabras pueriles, sino que fuera mucho más allá. Conocedor de la necesidad de una ciudadanía responsable y con confianza en sus capacidades, Felipe VI les hizo ver que los trabajos que han realizado constituyen un diálogo entre ellos y el Rey, un medio para que ellos conozcan y comprendan cuáles son las funciones que corresponden al Rey, qué representa o qué debe representar; y a su vez, un canal para que Don Felipe conozca lo que ellos creen que debe hacer y representar. Un diálogo del que el Rey aprende y que le refuerza en muchas de las cosas que tiene que hacer. 

Planteados en esos días complicados de los que hablaba el Rey, este mensaje y esta confianza que se establece entre el Jefe del Estado y estos jóvenes ciudadanos, adquieren un valor añadido. 

Don Felipe junto al Patronato de la Fundación Institucional Española (FIES) y miembros de la Fundación Orange
Don Felipe junto al Patronato de la Fundación Institucional Española (FIES) y miembros de la Fundación Orange