El 16 de abril de este año 2020 estaba llamado a ser un gran día para la milenaria Monarquía danesa. La reina Margarita alcanzaba ese día la venerable edad de 80 años. Sin embargo, la crisis sanitaria por la que está atravesando el mundo entero le impidió celebrarlo según estaba previsto y tuvieron que ser suspendidas todas las actividades y fastos en su honor. Como la propia reina afirmaba en su mensaje a la nación con esta ocasión, habían “recibido la visita de un huésped no invitado y peligroso que ha marcado a todo el país. Muchas celebraciones, confirmaciones y bodas se han visto afectadas, y este es también el caso de mi cumpleaños.” El pueblo danés no pudo mostrarle directamente el cariño, el respeto y la admiración que le profesa, aunque sí se lo hizo llegar de muchas formas, echando mano de “la creatividad y el ingenio” que la soberana reconocía y agradecía públicamente. Si la reina no pudo salir al balcón de palacio a saludar a sus ciudadanos, ellos salieron a sus propios balcones para cantarle. Por otro lado, muchos miembros de la realeza europea -entre ellos Don Felipe y Doña Letizia- se unieron en un vídeo en que felicitaban a la “tía Daisy”, como la llaman cariñosamente, y le dirigían cálidas muestras de afecto.

Dos meses después, cuando parece que las aguas se han calmado un poco, y con mucha cautela por un futuro extremadamente incierto -tanto a corto como a medio y largo plazo-, en la Corte danesa han podido retomar alguno de los actos con los que celebrar el cumpleaños real. Entre ellos, destaca la exposición “Rostros de la Reina”, instalada en el Museo Nacional de Historia e inaugurada por la Reina junto a los Príncipes herederos, y que retrata la vida de Su Majestad, su trabajo y aficiones, exhibiendo para ello películas, trajes, elementos escenográficos y retratos de la reina a lo largo del tiempo. En la exposición se ha integrado igualmente un retrato oficial de Margarita II, realizado especialmente con ocasión de su 80º cumpleaños por el artista Niels Strøbek.

Sin embargo, este no ha sido el único retrato de la monarca en esta fecha tan significativa. En lo que fue sin duda el acto más entrañable de los celebrados estos días, la reina recibió 98 obras artísticas -una por cada municipio de Dinamarca- que habían realizado niños de tercer curso (9 años) de todo el país. Con diversas técnicas -dibujo, pintura, collage…- los pequeños hicieron uso de su ingenio y dotes artísticas y retrataron a su reina en multitud de situaciones, desde las estampas familiares, los actos oficiales y solemnes, en sus palacios, descansando o viajando por distintos puntos de la geografía nacional o dedicándose a una de sus pasiones, precisamente la pintura. La idea provino de los municipios daneses y la asociación KL-Gobierno Local Dinamarca, como su regalo oficial por los 80 años de la monarca.

La exposición de las obras ha tenido lugar en el Palacio de Christiansborg, donde Margarita II recibió a sus jóvenes retratistas y compartió con ellos un tiempo de lo más agradable. Originalmente, la intención era que dos niños de cada municipio viajaran al Palacio el día anterior al cumpleaños de la reina, para entregarle la obra seleccionada en su localidad. Sin embargo, debido al coronavirus, el acto fue cancelado en su momento y se retomó en junio con un formato distinto: sólo unos pocos escolares pudieron estar presentes, al tiempo que muchos más se unieron al acto de forma digital, siendo además retransmitido por la televisión nacional.

La reina recorrió la exposición junto a sus invitados especiales, tras haberles escuchado interpretar la canción compuesta por Sigurd Barrett para la reina, “Dinamarca en mil años”.

Desde España Real nos congratulamos ante una iniciativa que tiene mucho en común con el concurso “¿Qué es un Rey para ti?” que nuestra Fundación viene organizando desde hace casi cuatro décadas, en los últimos años con el generoso patrocinio de Orange, y en el que invitamos a los escolares a que reflexionen, de la mano de sus profesores, sobre la Corona y las Personas que la encarnan, y tomen conciencia de la realidad institucional de nuestro país. Sería una excelente noticia que esta actividad fuera dotada en Dinamarca de continuidad en el tiempo, a partir de este momento de celebración.